El silicio como soporte de los circuitos electrónicos en la escala nanométrica no ofrece la misma fiabilidad que a mayor escala, por eso se están buscando nuevas alternativas a su uso.
Aún no está claro cual será el sustituto, existen diferentes componentes nanoelectrónicos que reúnen los requisitos como por ejemplo el nanotubo de carbono (del que ya nos hemos ocupado en un apartado anterior), las moléculas, los nanohilos... Todos comparten la escala nanométrica y lo que se conoce como el transporte balísitico, que no es otra cosa sino diferente comportamiento de los electrones en esta escala y que contradice la ley de Ohm al no existir ningún tipo de resistencia en un espacio tan diminuto.
Como hemos dicho las moléculas orgánicas son una de las opciones para sustituir al silicio en la escala nanométrica. Anteriormente hemos hablado de una de ellas el fullereno, pero existen diferentes tipos de moléculas electroactivas. Un ejemplo del uso que actualmente se le da a estas moléculas son los diodos orgánicos emisores de luz, OLED (Organic Light-emiting Diode).
Los nanohilos metálicos son unos buenos candidatos a servir como nanoconectores entre los diferentes dispositivos de un chip.
